Este crudo asesinato de Kim Gómez, de apenas 7 años, ha remecido a todo el mundo, por la crueldad de los homicidas de 15 y 17 años.
Los delincuentes arrastraron por 15 cuadras a la pequeña tras robar el vehículo de la madre de la pequeña.
Recordemos que hace poco tiempo habló el padre de uno de los delincuentes, que pidió la condena máxima para su hijo. Expuso también que: “Mi hijo es una mierda de persona”.
Posterior a esto salieron a hablar los padres de la niña.
“Se llevaron a mi Ángel”
Frente a los medios argentinos, habló el padre de Kim, Marcos, aseguró que “somos gente buena y laburante. Nos destrozaron, nos hicieron mierda. La tengo a mi vieja muriéndose y a la mamá de la nena también”.
“Yo sé que soy fuerte, pero en este momento me siento mal. Se me parte el alma, se me llevaron mi ángel, mi nenita. ¿Cómo se pueden meter con una criatura? No les importa nada”, lamentó.
Además, confesó lo siguiente. “Me llamó el papá de uno de los chicos (asesino), estuve llorando toda la noche, mirando fotos, recuerdos. Me llamó, me quiso pedir disculpas, le quiero dar la oportunidad que me venga a pedir disculpas y me mire a los ojos”
Le solicitó que, “quiero que vayas al cementerio a despedir a mi hija. ¿Sabés que le gusta? Le gustan los capibaras. Llévale un capibara”.
“No me puedo olvidar las imágenes”
A su vez, habló Florencia, la mamá de la víctima de este crudo homicidio. Explicó estar destrozada y que espera que los causantes de la muerte de su hija paguen una pena justa.
“Que se haga justicia, Kim no fue la primera, pero quiero que sea la última. Me la destrozaron a mi bebé. No me puedo olvidar las imágenes”, declaró la mujer entre lágrimas, acompañada de su marido.
Solicitó, mientras lloraba, que “no nos dejen solos, queremos que nos ayuden en todo lo que puedan”.
Por otro lado, comentó que tuvo un cara a cara con uno de los asesinos de su hija. Sobre esta situación, Marcos declaró lo siguiente, “lo pude ver a la cara. Me quiero guardar para mí las cosas que sentí porque tuve muchas sensaciones feas, malas, inclusive, algunas hasta buenas. Es raro, es difícil. No le deseo a nadie pasar por esto”.
Además, confesó que “le pude decir algunas cosas al chico y la verdad que me siento bien”.