El caso que impactó en los últimos días a Concepción es el del homicidio frustrado de un conocido comerciante de la zona, que vivió un macabro giro en 180°, al revelarse que sus propios hijos estaban involucrados en el crimen.
Todo comenzó el pasado viernes 19 de julio, cuando Mauricio Guzmán Lincolao (51), llegaba de madrugada a trabajar a su cocinería ubicada en el Mercado Hermanos Carrera. Ahí es cuando un hombre desconocido se acercó y le disparó en la cabeza.
A pesar de la gravedad de la herida y de que lo dejaron tirado en la calle, pudo ser trasladado hasta el hospital más cercano en Concepción, donde estuvo por varios días con riesgo vital y afortunadamente sobrevivió.
Y a más de un mes del ataque, Fiscalía reveló que el caso era mucho más siniestro de lo que se imaginaba. Esto debido a que detuvieron a un hombre de nacionalidad colombiana como autor material, y a los tres hijos de Guzmán, acusados de pagar al «sicario» para matar a su padre.
Mandaron a matar a su padre y luego lo visitaban en el hospital. Impactante vuelco en caso de comerciante baleado en Concepción
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— T13 (@T13) August 22, 2024
Los fuertes detalles del intento de homicidio en Concepción
De acuerdo a lo consignado por Elcontraste.cl, durante la formalización se reveló que los tres hermanos le ofrecieron $3 millones para concretar el asesinato. Además, le entregaron una pistola, balas, junto con la información de sus rutinas e incluso fotos de su padre.
Tras haber estudiado a su víctima, el «sicario» llegó en Uber hasta el lugar de los hechos, donde abordó al comerciante. En ese momento apretó el gatillo, pero la bala no salió. Con el segundo intento pasó lo mismo, instante que aprovechó para suplicar «no lo haga mijo». Pero con el tercer intento lo hirió en la cabeza.
La Cuarta consigna que como su padre no murió, los hermanos tenían serias dudas con el sicario, pues no logró con el objetivo que le habían encargado. Motivo por el cual decidieron no pagarle el monto completo que le habían prometido.
Según el testimonio que dio el propio «sicario» colombiano, al momento del trato le entregaron $390 mil. Posteriormente, se comunicó para informar que el «trabajo» estaba hecho y esperaba el resto del dinero. Tras pedirle que no llamara más, lo contactaron al tiempo después para pedir el arma y darle otros $500 mil.
Finalmente, al sujeto le pagaron cerca de un millón y medio de pesos, lo que lo dejó más que molestó y se convirtió en el motivo para confesar el crimen a la policía.
Los hermanos visitaron a su padre tras el crimen
Uno de los detalles que más impactó al público, es que mientras el hombre seguía internado de gravedad en el Hospital Regional de Concepción, sus tres hijos lo visitaban constantemente, para evitar las sospechas.
Pero tras conocerse la detención de los hermanos, familiares de la víctima revelaron que uno de los motivos que habrían tenido para matar a su padre, es que tiempo atrás presenciaron peleas entre ellos y presumen que serían por dinero.
Es en este contexto que, ya formalizaron tanto al sicario como a los hermanos, quedando todos en prisión preventiva. En el caso de los últimos, los imputaron por parricidio en grado de frustrado.