El Chacotero Sentimental presenta la historia del masoterapeuta: «Estaba poseída en el acto, tuve que exorcizarla con el pi…»
Esta historia llegó hace poco a la radio, pero desde ahora se transformó en todo un clásico, ya que el auditor confesó que cuando conoció a una chiquilla le picaron las manos para masajearla, hasta que cuando estaban ahí... pasó lo más chistoso.