En una reciente entrevista con La Cuarta, Kathy Orellana sorprendió al hablar en extenso sobre lo que ha sido el proceso de rehabilitación que enfrenta desde 2021 por su adicción al alcohol y que la ha llevado a tener un radical cambio de vida.
Para comenzar, la cantante confesó que el fin de ‘Rojo’ se convirtió en un detonante, ya que al terminar el programa, comenzó a salir y tomar todos los días y «sin darme cuenta estaba empantanada en el alcohol y la droga. Estuve un tiempo funcional, pero nada. Como mi droga madre era el alcohol, curada, en ningún lado».
Siguiendo por esta línea, Kathy Orellana recordó que «alcoholizada le podía decir sí a todo. Hay muchas cosas, incluso de mi vida, que no me acuerdo, y que en terapia he podido desbloquearlas… Perdonarme fue mi primera acción de amor propio, por la poca conciencia de enfermedad».
«Lo más difícil para un ser humano, siendo adicto a lo que sea, es pedir ayuda; uno siempre quiere arreglárselas solo y que uno tiene la razón. Realmente a veces uno necesita la ayuda. Es de valientes», continuó La Morenaza de Rancagua.
Por otro lado, Kathy Orellana mencionó que en un punto estaba «totalmente enferma», mencionando que «la adicción es una enfermedad, así como la obesidad, y lamentablemente en este país no se ve así. La adicción ni siquiera es una enfermedad de la droga y el alcohol, es la enfermedad de las emociones».
El momento en que Kathy Orellana decidió rehabilitarse
Pasando a su rehabilitación, relató que comenzó a fines del 2021 y que «Curá tomé la decisión, me fui con una caja de vino para el centro. Es tan cuática la adicción que uno, en definitiva, sabe que la está cagando, pero estás tan empantanado que quieres salir y no puedes, porque el cuerpo te lo pide».
«Llamé a mi papá como a las 9 de la noche y le dije: ‘Ven a buscarme a las 9 de la mañana que me voy a un centro’, y me contestó: ‘Si me estás leseando, no te llevo más’. Quedaba en Melipilla, me llevó y me fui tomándome una caja de vino; llegué ebria», continuó.
Tras esto, confesó al medio antes nombrado que «las dos o tres primeras semanas lo pasé horrible, porque la desintoxicación del alcohol es muy fuerte, la falta de… convulsiones, vómitos, arritmia, insomnio y alucinaciones. Me llevaron como tres veces de urgencia al hospital en Talagante porque convulsionaba y vomitaba espuma».
Finalmente, Kathy Orellana se refirió a las críticas del público. «La gente se pregunta si yo estaba consumiendo pasta base, y no, era puro alcohol. Tomaba mucho, mucho, todo el día, desde que me levantaste hasta que —no podría decir me acostaba— apagaba tele. Así era mi sistema de vida».
«Pero alcoholizada le podía decir a todo lo que viniera si es que estaba en algún lugar, pero por lo general siempre lo hacía sola, en una pieza, nunca con gente. Nunca lo mio fue social… No digo que no consumí algún tipo de droga, posiblemente, ¡pero no me acuerdo!, jajaja. Hoy día me rio, pero, por ejemplo, cuando me hicieron los tests de drogas para el ingreso, no tenía nada más que alcohol. ¡Era tanto el alcohol que ni marihuana fumaba!», cerró.