Ya van quedando los últimos días de frío, así que preguntas sobre cuándo se realizará el cambio de hora se multiplican. Para algunos, el horario de invierno no es el favorito debido a que oscurece más temprano, reduciendo las horas de luz disponibles al final del día, lo que puede afectar la vida diaria y la productividad laboral.
Es en este contexto que muchos esperan con ansias la llegada del horario de verano, que generalmente comienza cerca del inicio de la primavera. Este cambio implica adelantar los relojes en una hora, lo que a su vez significa disfrutar de tardes más largas y soleadas, un motivo de celebración para muchos.
Según lo informado por Publimetro, el próximo domingo 3 de septiembre marcará el inicio del cambio de hora. En esta fecha, todos los relojes deberán adelantarse 60 minutos, transformando la medianoche en la una de la madrugada. Este ajuste horario se mantendrá en vigencia hasta abril de 2024, brindando una prolongada temporada de días más extensos.
Es importante destacar que el cambio de hora no se aplica en todo Chile. La excepción recae en la región de Magallanes y la Antártica Chilena, que mantienen el mismo horario durante todo el año debido a sus condiciones geográficas particulares. Las cuales hacen que esta medida no sea conveniente para la zona.
¿Cómo afecta a la salud el cambio de hora?
Modificar el reloj puede tener efectos en la salud, especialmente en ciertos grupos de la población. Esto puede provocar trastornos del sueño, manifestados en irritabilidad, somnolencia, falta de concentración y síntomas similares al jet lag.
La académica Margarita Bórquez, del Departamento de Psicología de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Chile. Destaca las diversas implicaciones de esta variación horaria en nuestra salud. «Es el menos favorecedor para nuestro bienestar, a pesar de que es popular porque se perciben más horas de luz en las tardes».
Es de esta forma que, aunque algunos estén esperando el cambio de hora por la promesa de días más largos y soleados, también plantea desafíos en términos de adaptación y salud, que conviene tener en cuenta a medida que nos preparamos para este ajuste temporal en nuestras vidas.