La noche de este domingo se estrena la nueva temporada de ‘Aquí se Baila’, la que se viene más competitiva que nunca. Y entre los participantes se encuentra Janis Pope, quien se hizo conocida gracias a su participación en ‘Protagonistas de la Fama’ y que lleva más de 10 años alejada de la televisión.
«Cuando me llegó la propuesta, lo primero que dije fue ‘wow, ¿en serio? ¿No se habrán equivocado?’. Pero mi respuesta siempre fue un sí. Sabía que lo iba a hacer, porque me encanta bailar, y volver a bailar en televisión es para mí como llevarle a la gente un poquito de ese arte que tengo guardado», indica.
Para ella retornar a trabajar en Canal 13 es una experiencia emocionante, habiendo pasado exactos 20 años desde que ingresó a ‘Protagonistas de la fama’. Más aún porque ‘Aquí se Baila’ se produce en el mismo estudio donde ese año 2003 Janis Pope pasó tres meses encerrada en el primer reality show chileno.
Janis Pope y su regreso a la televisión
«Tiene un significado súper especial para mí volver acá. Cuando venía entrando al canal al primer ensayo me acordé de cuando venía en el Metro con mi bolso desde Melipilla para entrar al encierro, y después pasar por el estudio donde vivíamos, toparme con los camarógrafos y los técnicos, gente que no veía hace tantos años. Lo mismo toparme con Sergio (Lagos), porque es muy especial y muy emotivo volver a tenerlo como conductor. Es bonito que sea en este canal y en este estudio en particular», opina.
Junto con decir que está muy contenta y motivada con la oportunidad, Janis Pope destaca que su familia la acompaña en cada paso, ya que su esposo Diego Dellacasa y sus hijos Ciro, de seis años, y Vitto, de sólo 10 meses de edad, se vinieron a Chile para acompañarla en cada ensayo en el canal.
«Lo mejor de esta experiencia es poder hacerlo acompañada por mi guagua, que para mí es fundamental. Además, tengo un súper equipo», dice, agregando que tiene en Nicolás Donoso al mejor coach y en Felipe ‘Negro’ Basáez al mejor bailarín.
Janis Pope, quien tuvo formación de bailarina clásica en su juventud, con 10 años en el Teatro Municipal de Santiago, afirma que lo que más le ha costado para integrarse al programa es volver a mover el cuerpo.
«Hace 12 años que no bailaba. La primera semana de ensayo me costó mucho, tenía muchos dolores de cuerpo, pero ahora ya estoy sintiéndome mejor. Con el paso de los días uno va recuperando esa memoria física y mental, de recordar qué músculo se mueve con cada movimiento, y eso es entretenido, ha sido un redescubrirme», sostiene.