La noche de este domingo, María Luisa Godoy será la nueva invitada a De tú a tú, donde la animadora no solo hablará de su vida actual, sino que la relación con su padre, de sus expectativas para el Festival de Viña 2023 y de su quinto bebé por nacer, a sus 42 años.
Ya embarazada de ocho meses, el rostro de TVN destacará que la experiencia de ser madre es lo más bello que ha hecho.
“La maternidad es lejos lo mejor que me ha pasado en la vida. Yo siempre quise ser mamá, hay personalidades que tenemos la maternidad a flor de piel, y yo siempre supe que era lo que más quería en la vida. Es un amor que no tiene que ver con nada, por primera vez uno se siente vulnerable, de decir que esto es tan inmenso que si le pasa algo me muero. Me cambió, porque nunca había conocido un amor tan grande en la vida, nunca había sido tan feliz, y es lejos lo que más me apasiona, me gusta y disfruto”, indica María Luisa Godoy.
Junto con esto, uno de los temas más interesantes a los que se referirá, será sobre el momento en que, a los 26 años, se casó por primera vez, en un matrimonio que duró solo algunos meses.
«Mi primer matrimonio fue mi primer gran fracaso. Yo me había terapiado, me tomé ese pololeo como si fuera un matrimonio, tratando de sacarlo adelante. Por eso me sentí en ese minuto muy fracasada, sentí que llevaba mucho tiempo trabajando para que eso no me pasara. Lo sentí como algo muy doloroso y me costó muchos años superarlo», revelará.
María Luisa Godoy y la muerte de su padre
Eso sí, lo que rescata María Luisa Godoy de ese breve matrimonio es que, tras separarse, invitó a su papá, el exdiputado Domingo Godoy, que 15 años antes había sufrido un derrame cerebral, a vivir con ella.
«Mi papá tenía la edad de los abuelitos de mis amigas», relatará: «Me impactó mucho vivir ese último tiempo con él, ya estaba postrado y no podía caminar, y por primera vez sentí miedo a algo, y fue a la invalidez».
Siguiendo por esta línea, María Luisa Godoy se confesará sobre cómo vivió su muerte, a los ocho años de vivir juntos, cuando decidió despedirlo en casa en vez de llevarlo a un hospital.
“Me despedí de mi papá de una forma muy bonita. Se empezó a apagar, llamé al geriatra, y me dijo que le quedan 24 horas, entonces podíamos llevarlo a la clínica o dejar que muera en la casa (…) Mi papá odiaba los hospitales, siempre me decía que lo único que quería era morirse en casa, en paz”, recordará la comunicadora.
“Entonces llamé a todos sus hijos para que se despidieran. Él amaba la música clásica, así que le puse música clásica, le llevamos un sacerdote que le diera la extremaunción, rodeado de sus hijos y se fue súper en paz”, concluirá.