Hay pastelitos que son increíbles. Es que simplemente algunas personas se pasan de patudos; resulta que ahora un italiano quiso que le dieran el pase de movilidad sin vacunarse. Lo peor de todo, es que trató de hacer lesa a la enfermera usando un brazo de goma.
El hombre, que tenía 50 años, llegó por su dosis con un molde de silicona que cubría su brazo real. Todo esperando que no lo cacharan.
Pero una enfermera se percató de inmediato, y el hombre fue rápidamente reportado a la policía.
La profesional afirmó a medios locales que cuando le subió la manga, se dio cuenta de que su piel era «gomosa y helada». Además el pigmento era «demasiado claro».
Luego de ser descubierto, el hombre trató de persuadir a la enfermera para que «no lo acusara». Sin embargo, según reportó La Repubblica, la profesional cumplió con su deber y lo reportó por la fraudulenta.
Más encima trabajaba en salud
La policía local está investigando el incidente en Biella, ciudad que se encuentra al noroeste de Italia. Diferentes autoridades local cuestionaron y criticaron las acciones de este pastelito.
«El caso es casi ridículo. Podríamos tomarlo con humor, si es que no se tratara de algo extremadamente grave», aseguró Albert Cirio, director del gobierno regional de Piedmont.
«Este tipo de triquiñuelas son inaceptables teniendo en cuenta los sacrificios que ha tenido que vivir nuestra comunidad durante la pandemia; todo en términos de vidas humanas, y costos económicos y sociales», agregó según reportó BBC.
Lo peor de todo es que el amermelao’ era un trabajador de la salud que había sido suspendido de su trabajo por no vacunarse. La inyección es obligatoria para todos quienes trabajen en hospitales en la península italiana.
Según afirma la Repubblica, el incidente podría no estar aislado. Es por esto que llamaron a no imitar a este brillante genio.