Alejado de la televisión se encuentra el exchico ‘Yingo, Hardcorito quien luego de una exitosa carrera en la pantalla chica, hoy está dedicado a otras cositas.
El chiquillo de 34 años está de cabeza en su fundación dedicada a mejor la salud mental de las personas.
En entrevista con Las Últimas Noticias, se refirió a Salud Emocional, nombre de la organización que lidera.
«Queremos agrupar a todas las fundaciones relacionadas con este problema y darles visibilidad aprovechando que nuestro fuerte son los contactos con gente conocida. Queremos ser el puente para luchar en pro de la salud mental», dijo Hardcorito.
Al saber cómo se le ocurrió hacer este proyecto, el chiquillo dijo «porque pensé si estoy pasando por esto, tengo que salir, ayudarme yo y ayudar a otras personas que están pasando por lo mismo».
También el chiquillo afirma que «con un rostro conocido todo se mueve más rápido, como pasó con Ricarte Soto. En los pocos años se logró que una necesidad se convirtiera en Ley».
Sobre el apoyo, el chiquillo afirma que ya hay acuerdos con muchos famosillos de la tele y de internet para darle visibilidad a la fundación. Entre ellos estaría el animador de Chilevisión, Julio César Rodríguez.
«Hay muchas fundaciones que no tienen ninguna visibilidad y ya he conversado con mucha gente de la tele y tengo cerca de 50 personas que ayudarían siendo influencers», expresó.
«Ahora que se va a escribir la nueva Constitución, la idea es que en ella se incluya avances sobre temas de salud mental», explicó el chiquillo.
La condición de Hardcorito
Desde pequeño Hardcorito estuvo bajo tratamientos psicológicos, pero no fue hasta de adulto cuando se separó de su pareja lo que detonó en una crisis de ansiedad.
«Un día desperté borrado, había llorado como loco y cuando desperté sólo sabía que tenía hora con la psicóloga«, comentó el chiquillo, asegurando que «era como estar en un sueño, un trance».
Después de exámenes, el chiquillo fue diagnosticado con Trastorno de Ansiedad Generalizado (TAG), quien en la entrevista bromeó con la sigla del peaje: «Donde voy tengo que pagar el precio», dijo.
«Me dan más seguido las crisis, pero eso es indicio de que estoy mejorando. Cuando lo aceptas empiezas a trabajar en tu persona y ahí enfrentas tu realidad. La última la enfrenté solo y me duró poco, estoy feliz por eso», detalló.