Casi 100 años tuvieron que pasar para que el barco SS Cotopaxi fuera encontrado en el fondo del mar. La embarcación salió el 29 de noviembre de 1925 desde Charleston, Carolina del Sur, Estados Unidos, en dirección a La Habana, Cuba, pero nunca llegó a destino.
La nave contaba con 32 tripulantes y una carga total de 2.351 toneladas de carbón, que viajaban a la ciudad cubana para cerrar un acuerdo comercial. Sin embargo, solo dos días después de haber zarpado, se le perdió la pista, precisamente en la zona del Triángulo de las Bermudas.
El barco desapareció sin dejar una sola pista, salvo una pequeña señal de socorro: esto sucedió el 1 de diciembre de 1925, cuando algo sucedió que provocó que el carguero mandase un mensaje inalámbrico solicitando ayuda. Solo unos minutos después se hizo humo, y nunca se supo que sucedió con la embarcación, la carga ni menos con los tripulantes.
En la fecha en que desapareció el barco, todavía no se hablaba del Triángulo de las Bermudas. El concepto nació en 1953, fecha en que los primeros investigadores de esa área geográfica —con forma de triángulo equilátero ficticio, situado en el océano Atlántico, entre las islas Bermudas, Puerto Rico y Miami— empezaron a unir extraños casos: durante varias décadas, extrañas desapariciones de barcos y aviones llevaron al nacimiento de este mito.
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Se calcula que en el siglo XX se produjo la desaparición de unos 50 barcos, además de unos 20 aviones, todos ellos de manera inexplicable en el mismo lugar. La mayoría no dio señales antes de evaporarse y en muchos casos no se ha vuelto a saber nada de los aparatos ni de los tripulantes que iban en ellos. Aunque tiene más de leyenda que de realidad.
Uno de estos casos es el del SS Cotopaxi. Para desentrañar este misterio, el biólogo marino Michael Barnette y el historiador británico Guy Walters trabajaron mano a mano. Después de analizar concienzudamente la información que conocían del barco en el momento previo a su desaparición, los expertos pronto descubrieron que podían haber hallado la solución, recoge Newsweek.
Tras acudir a los archivos de Lloyd’s of London, la aseguradora del barco, hallaron la posición exacta desde la que el barco mandó su última señal de socorro aquel 1 de diciembre de 1925. Cuando acudieron a la zona, a unos 65 kilómetros de la ciudad de San Agustín, en Florida, hallaron los restos de un barco en el fondo del mar: tras analizarlo en profundidad, descubrieron que se trataba del SS Cotopaxi, aquel barco desaparecido en el Triángulo de las Bermudas.
Curiosamente, el lugar del hundimiento era conocido localmente como Bear Wreck (Naufragio del oso) y en ningún momento había sido relacionado con el SS Cotopaxi. Ahora, los detalles del descubrimiento serán dados a conocer en «Shipwreck Secrets», la serie de Science Channel, aunque aún quedan misterios sin resolver.