Un padre con sus dos hijas de Bendingo, Australia, decidieron salir a caminar y aprovechar de sacar a pasear al perro, sin saber que esa caminata los iba a volver ricos.
Mientras paseaban a su perro Lucky, se toparon nada menos que con una enorme pepita de oro. Si no es por una de sus hijas que se percató del objeto en el suelo, seguramente nunca la habrían encontrado.
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«De hecho, lo pasé por alto, pero mi hija casi lo patea mientras caminaba. Ella dice: ¿Papá, es este oro? Dije, creo que podría ser», dijo el hombre que ha querido mantener su identidad en reserva.
Al no estar seguro de lo que tenían en sus manos, decidieron llevarlo donde un entendido en el tema. Ahí les dijeron que efectivamente se trataba de oro. Específicamente 354 gramos del metal precioso equivalente a 24 mil dólares (unos 16 millones de pesos), según Bendigo Advertiser.
El padre reconoce que han pasado por momentos difíciles y que actualmente no se encontraban bien económicamente, por lo que el hallazgo fue un verdadero regalo del cielo.
«Realmente no podría ser un mejor momento», reconoce el hombre quien agrega que quiere venderlo, ya que no se siente tranquilo con la «roca» de oro en su casa.
«Al tenerlo en casa, he estado como ¿dónde lo guardamos? No he estado durmiendo muy bien y creemos que es mejor venderlo», señala.
