Una trágica muerte encontró una trabajadora en una compañía de procesamiento y distribución de carne en Pensilvania, Estados Unidos, tras caer en una máquina trituradora mientras realizaba labores en la empresa.
Jill Greninger, de 35 años, estaba parada sobre una escalera con ruedas antes de la caída, explicó a los medios locales el jefe forense del condado de Lycoming, Charles Kiessling.
«Fue una tragedia. No sabemos si ella cayó o resbaló mientras intentaba alcanzar algo dentro del molinillo, que estaba a unos dos metros del suelo», dijo Kiessling.
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Lo cierto es que otro empleado escuchó un ruido extraño y corrió a ver que sucedía. El hombre apagó de inmediato la máquina, pero no alcanzó a evitar que el accidente fuera fatal.
Hasta la empresa llegaron bomberos para ayudar en la emergencia, pero la mujer ya había fallecido. Los equipos de emergencia tardaron cerca de 45 minutos en abrir la máquina trituradora para recuperar el cuerpo de Greninger. «Ella murió dentro de la máquina», explicó el forense.
La compañía de Pensilvania, Country Store Brand, fue fundada en 1905, y según sus registros, la muerte de Jill Greninger es el primer accidente fatal en toda su historia.