¿Pero cómo? Ahora sí no se puede creer que el ganador del Kino, quien hasta hoy era un completo desconocido haya tirado, sin querer, por la borda la posibilidad de convertirse en millonario.
Hace algunos días te contamos que el suertudo dueño de más de dos mil millones de pesos, tenía solo hasta fin de mes para cobrar su premio -revisa la historia aquí-, y cuando finalmente aparece Javier Zapata, un agricultor de 40 años, reconoce que su Kino lo tiró a la basura una vez que se realizó el sorteo.
Y es que cuando se dio cuenta que su billete con los números que ha jugado toda su vida lo hicieron ganador, lo recuperó y ya estaba bastante deteriorado. «Hicimos una limpieza con mi señora adentro de unos cuadernos viejos que tenía mi hija y por error se fue ahí entremedio. Nunca pensé que iba a estar ahí», dijo.
Lo triste de esta historia es que el boleto está en mal estado y eso podría perjudicarlo, porque según las bases de lotería «el cobro de premio podrá hacerse efectivo presentando el recibo ganador de manera íntegra, es decir, que no presente ilegibilidad, mutilaciones u otras alteraciones que no permitan validar el premio». Por eso si hay dudas sobre la autenticidad del recibo presentado en el cobro, «no se pagará el premio hasta comprobar fehacientemente tal autenticidad».
Por eso, a modo de prueba el flamante ganador compartió la foto de un boleto de sorteo anterior, el actual y un papel donde anota los números que siempre juega.
¡Esperamos que todo salga bien y pueda recibir su premio!