Carabineros ha identificado a 400 lanzas que «trabajan» de manera permanente en la red de Metro. La cifra es parte de un registro de 1.030 personas que han sido sorprendidas realizando este tipo de ilícitos.
En conversación con La Tercera, la mayor de la 60a Comisaría de Carabineros, Mónica Herrera, explica que se ha detectado a estos delincuentes con su nombre completo y prontuario en la red, información que es útil cuando hay detenciones.
Los lanzas ingresan al Metro pagando sus pasaje como cualquier otro viajero, en especial en hora valle, cuando hay menor flujo de personas, los que le permite desplazarse. Suelen trabajar entre una y dos personas en conjunto.
Los delincuentes suelen robar en estaciones como Baquedano y Tobalaba, debido al gran flujo de pasajeros. El robo más común es de teléfonos celulares: el 62% de los objetos hurtados corresponde a este elemento. Así, por ejemplo, los antisociales se acercan a las personas distraídas, observan la marca de los audífonos y se acercan a sustraerlos desde sus bolsillos o mochilas.
¿Cómo trabajan los lanzas? Herrera sostuvo que han adoptado técnicas más especializadas, como es la «teatralización» en algunos lugares donde se concentran los viajes. Uno de los ladrones simula caer al suelo afectado por alguna enfermedad, por lo que los transeúntes se acercan a ayudarlo. En ese momento, otro lanza se acerca y sustrae objetos aprovechando la distracción.