“Pedía disculpas por lo que estaba haciendo. Sabía que iba a hacer a mucha gente sufrir, que iba a hacer mucho daño. Pero que ya no daba más. No daba más. No lo aguantaba. Lloraba. Jefferson estaba muy decidido”, contó entre lágrimas.
Pero hubo una declaración más dura, en contra Pamela Beytia, madre de la hija de 13 años que tenía junto a Jeff:
“La noche anterior a lo sucedido, cerca de las 12 de la noche, Jefferson recibe una llamada de su ex, y le dice lo siguiente: ‘Desaparece, porque mañana voy a hacer una denuncia, te voy a llevar detenido otra vez. Entonces, o tú te matas, o te mato yo’”, contó y agregó “ese fue el llamado que recibió Jefferson, cerca de las 12 de la noche, y ella le decía exactamente eso. ‘O tú te matas o te mato yo’. Estábamos yo, Jefferson y Jociney. Jociney toma el teléfono y le dice a esa señora: ‘Por favor, cualquier duda o problema que tengas, entra en contacto con nuestro abogado. No llames más a Jefferson’. Y ella contesta: ‘Mañana voy a denunciar a tu hermano y que él desparezca’. Y le cuelga el teléfono….Jefferson, que ya estaba en un estado anímico muy bajo, ya no tenía reacción. Eso fue a las doce de la noche, justo antes de la noche de lo ocurrido”.